De la importancia de lo efímero

Nada efímero cabe en una mente estrecha-

Lo eterno sólo adquiere valor en lo efímero.Porque cuanto vemos o palpamos con nuestro incipiente espíritu está hecho de incontables brevedades temporales.

Y nosotros mismos como moléculas de agua a la deriva de la oceánica y convulsiva selva protoplásmática.

Puede la eternidad contemplarse en sí misma sino en lo efímero?

Puede ser tan preciosa desde lo eterno sino en lo efímero?

Pobre eternidad,pobre infinito.Cuánta soledad sin sentido.Qué sería de ambos sin la presencia constante de lo efímero?

Quién estaría allí para celebrarlo?

Quién más pendiente de su pulso vital que lo efímero?

Y no es la eternidad un infinito sendero de lo efímero?

Acaso una recta deja de ser infinita en la pequeñez de sus puntos?Y no son sus puntos tan infinitamente pequeños como la imaginación es demasiado gruesa para medirlos?

Si se pudiera contar los puntos de una recta en una sola vida,esa vida sería una eternidad.

Y cómo puede concebirse la recta sin la la concepción infinita de sus brevedades,sin la vastedad de sus ínfimos puntos?

Lo efímero también podría estar sujeto a una falta de talento suficiente como para percibir en él la eternidad en que participa y considerarla ajena a la sustancia última de lo eterno.Para ver en lo efímero un estado momentáneo de su naturaleza incomprensible.La naturaleza de una eternidad en expansión constante.Entonces,tal vez,cabría lugar para pensar si es lo eterno una realidad mayor o sólo la proyección hasta el infinito de lo efímero.

Como sea que fuese,sólo podemos aprehender desde lo efimero,sólo tenemos lo efímero como sostén de nuestro pensamiento como también de nuestros sentimientos.De allí la fragilidad de la vida,la tendencia hacia la duda,el asombro.Todo un cosmos interior pendiendo de lo efímero.

Sin lo efímero no habría ni nube,ni brisa,ni rocío,ni hierba.Y ninguno de ellos sin los otros.

Quizás los días se volverían tan iguales hasta convertirse en un mismo camino.Y posiblemente perderíamos el sabor de la comida,el olor de cada esencia,el encanto de cada poesía y hasta el anhelo.

Sin lo efímero no tendría espacio entre nosotros la pasión y no encontraríamos sorprendente el amanecer.

Por eso lo efímero nos impulsa a preguntarnos,a indagar,a buscar,a imaginar y a luchar,como si existiera un real motivo de sospechar de lo efímero,de poner en dudas el concepto.

Y nos conmina a sentir el presente como si estuviéramos vivos para siempre.Como si fuera imposible imaginar esa nada que nos dispone un sitio en la lista interminable de lo efímero.Tan efímera es nuestra vida que nos resulta difícil apreciar la de una mosca o la de uno de esos bichos que mueren el mismo día que nacieron.¿Acaso no parece un contrasentido esa breve existencia que casi invalida la seriedad de la Naturaleza al consentirse tal capricho?

Lo efímero es la causa de todas las preguntas sobre el sentido de la vida y de todas las búsquedas hacia la verdad aunque no la hallemos.

Lo efímero hace precioso el tiempo y digna de experimentarse a la vida por más incierta o brutal que se presente.

Y nadie celebra la eternidad.

Celebramos aquello que es efímero en el tiempo pero nos alimenta de vida eterna,como el amor,los hijos o la alegría compatida.

¿Late en lo efímero una luz inagotable que presagia y valida lo eterno?