La palabra pequeña es el corazón de mi blog. Esas palabras que son como las flores silvestres,tan cotidianas y tan increíbles en su sencillez que solemos creer que es imposible con ellas armar ramos espectaculares sin recurrir a sinónimos más ilustres .Y yo quiero aquí reinvindicarlas recuperando esa gracia auténtica que tienen las diminutas cosas esenciales. ( Protegidas por derecho de autor y publicadas)
lunes, 14 de julio de 2014
Dulce cicuta
A la curva infatigable de tu boca,
cuarto creciente,
envidiosa la luna;
sube la noche,
encaramada de joyas
muy dulcemente.
Con largos dedos de niebla
como gentiles cerrojos
en naos de sombra espesa
embarca cromos y formas.
Sobre mi frente,gaviota inquieta,
garùan helados sus besos tenues.
Ay!,què còmplice magia enciende
harpas de luz,
campos de flores remotos,
sobre el velamen negro
devorador del mundo,
para que yo pudiera,
a ciegas y torpe,
hallar la instancia fatal de una sonrisa.
.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario