Introducción

Una no pretende descorazonar.La ley del karma como tantas otras leyes religiosas han venido a llenar ese vacío intelectual frente al sentido de la existencia y de este mundo como las leyendas y mitos de los pueblos ancestrales explicaban las maravillas imcomprensibles de este caos tan pletórico de lógica como de misterio.

Curiosamente,los fenómenos paranormales percibidos por el espíritu humano siempre estuvieron sujetos y restringidos a grupos selectos.Estos grupos sólo dejaron decantar hacia el pueblo sumido en ignorancia vital unas hebras trenzadas en forma de sagrado misterio que en nada beneficiaba más que el consuelo de promesas celestes donde una divinidad reservaba un sitio del otro lado de la muerte,a los valientes,a los puros de carne,a los que sabían obedecer las leyes o daban su vida por el Amo en guerra.

Pero los pueblos que nunca se desconectaron de la Naturaleza,encontraron también una fuente de respuestas a muchos males físicos o pesares mentales.

El Cielo nunca fue un camino cerrado para nadie,parecía más fácil de alcanzar que cualquier otra cosa en la Tierra que se deseara y no se pudiera obtener.

Y como siempre hay una verdad oculta en el desconocimiento,la sospecha de que este mundo y esta vida,tal como la ostra,escondieran una luna dorada detrás de los rotundos pliegues de la noche definitiva que pone límite tanto al cosmos como a la mente que piensa,es irresistible como esperanzadora.

Hay una gran lógica en el deseo de continuar existiendo para quienes se vuelven adictos a la vida en la misma proporción en que la vida les corresponde.

Y como nadie tiene la última palabra,pensar de este modo positivo es sin dudas la mejor forma de encarar la vida.

Todo podría ser una ilusión de nuestra mentalidad positiva,incluso la luna dorada detrás de bambalinas.

Tras muchos años de no poder poner freno a mi mente viajera,tras los suceso extraños y singulares que me ofreció la vida,tras las pruebas rotundas que los sueños presentaron a mi conciencia,aún así tengo dudas,no pr falta de fe,que me sobra,de lo contrario no perdería mi tiempo como lo hago,tengo dudas de que todos los cuentos que nos han contado sean solamente una anestesia para nuestro espíritu inquieto.

Entonces,me digo,debo explorar lo otro.Lo que no nos han contado ni siquiera en hebras,ni siquiera en dosis de ciencia o religión o pseudociencia.Debo atreverme a pensar con las herramientas más primordiales con que cuento,a saber,mi corazón,mi mente,mis sentidos,mi sospecha,mis vivencias,y el conocimiento global que disponemos,aún el oculto.Muy dentro mío también hay respuestas si logro relacionar sueños,contenidos y dilemas.Pero siempre estaré sumergida en mí y en la mente humana que es la suma de sus supercherías llamadas conocimiento según tras cada era que el mono sapiens se plantó sobre el globo de cabezas para sentir qué es o qué hace aquí con la misma intensidad que le puso a vivir física,sentimental y mentalmente la vida.