sábado, 7 de noviembre de 2015

Comentando

Impecable esbozo de un misterio macabro.
Ciertamente que un análisis profundo nos remitiría a escritores como Michel Foucault.
Si existe algo que nos impide ver con claridad cómo surge de entre los hombres seres como quien pincela creativamente Marybel,creo que habría que buscarlo,que indagarlo primariamente.

Porque hay dos formas igualmente atroces de matar,una destruye físicamente una vida creyendo combatir el miedo,generar una supuesta seguridad o preservación de lo que es deseable o preferible para un resto.Otra,destruye sólo el alma y preserva el cuerpo para marginarlo,exponerlo al ridículo o usarlo de escarmiento.

Yo no puedo decir cuál de las dos es más macabra.Pero sí puedo asegurar que la segunda es la forma más rápida de engendrar monstruos internos que se multiplican en cada espejo de cada casa.

Evidentemente estamos condicionados a mirarnos hacia afuera.
Los monstruos están en otros lados pero sólo tememos al que ha sido rotulado con imágenes fosforescentes y fuegos artificiales.

Mi lado romántico me dice que la humanidad es, entre otras cosas mejores,una fábrica de monstruos porque aspira sólo a ángeles.Como el degustador pretende del cocinero la carne más tierna y los sabores delicados.Ergo,habrá siempre cuerpos que no llegarán a salir de su infancia entre las presas preferibles y siempre habrá un arma disponible,sea material sea sólo una red hecha con palabras.

Lo urgente es empezar a ver desde adentro el adentro más que poner énfasis el afuera del otro..
Se entrenan perros con la muerte,se entrena a la muerte con almas que alguna vez fueron libres e inocentes.

Todo esto es tan sólo un desprolijo comentario informal sobre una reseña prolija y excelente a la que nos tiene acostumbrados   +Marybel Galaaz ,hermosa escritora del siguiente blog que recomiendo:

+http://anonimaveneciana.blogspot.com.es/2013/07/heinrich-himmler-de-peter-longerich.html

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